La educación sexual en la etapa infantil
¿Cuándo se debe comenzar la educación sexual?
ü Con el despertar de la curiosidad del niño.
¿Qué debemos responder?
ü Debemos brindar explicaciones ensillas y adaptadas a su edad.
ü Responder inmediatamente.
¿Qué cualidades deben tener nuestras respuestas?
ü La veracidad: es la primera y fundamental cualidad de toda información sexual. La información que damos a los niños debe ser exacta de acuerdo a la realidad sin desfiguraciones ni deformaciones. La anatomía y fisiología son muy concretas, no hay por qué admitir imaginaciones ni fantasías.
ü La claridad: el niño espera respuestas que comprenda fácilmente, si las respuestas son vagas, el niño quedará insatisfecho y se alejará pensando que no encuentra en nosotros la orientación que buscaba.
ü Naturalidad: todos los temas sexuales deben ser tratados con naturalidad. La finísima sensibilidad del niño capta cualquier matiz de apuro, tampoco se debe tomar el tema con frivolidad o excesiva seriedad.
La actitud del educador ante las conductas sexuales infantiles.
La educación sexual del niño resultará apropiada siempre y cuando el adulto no esté bloqueado sexualmente, acepte su propia sexualidad y la de los demás, no sienta culpa ni vergüenza al tratar el tema, tenga claro que la información de sexualidad es una necesidad natural que se manifiesta en función a su evolución.
Como educadora nunca debemos negarnos a contestar las preguntas de los niños, no hablar aparte ni en forma de secreto, no castigar o reprimir por que pregunten o manifiesten su sexualidad. Lo que debemos hacer:
ü Emplear palabras correctas, responder sin tener en cuenta el sexo del que pregunta. Responder inmediatamente y con naturalidad. Facilitar preguntas que observamos que los niños no se atreven a plantear. Aprovechar cuando hay un embarazo para explicar el tema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario